lunedì 19 aprile 2010

RANDOM ARTIST MEMORY - PEDRO DELGADO EN LOFT OF BEAUTY



El 10 de abril se inauguró en nuestro amado Loft of Beauty la exposición Random Artist Memory de Pedro Delgado. Se pueden admirar varias piezas de su producción, realizadas con varias técnicas, que van de la pintura, al collage a las instalaciones. De fuerte impacto, las obras que más destacan son las dos grandes pinturas complementarias que describen la parábola del artista en la modernidad.
Creo que la menor manera para conocer este artista es a través de sus palabras, así que os invito a leer sus reflexiones.

« Esta exposición persenta una doble motivación. Por una parte, homenajear la memoria cultural del pasado, el peso sustancial de la herencia y la historia como estratificación, como la decantación del conocimiento sometido a procesos selectivos y erosivos. Por otra parte, la intrahistoria, mi pequeña historia personal, relatada a través de la selección de algunas de mis obras preferidas, a modo de anecdótica retrospectiva. Los medios: pintura, dibujo, collage y décollage, ensablaje e instalación.

Esta mañana, frente a un periódico prestado, me han llamado profundamente la atención las sinceras palabras pronunciadas por un artista octogenario. Se trataba de Juan Serrano (Córdoba, 1929), uno de los mimbros fundadores del Equipo 57 que, por el devenir de los años, acabó dedicando sus quehaceres a la arquitectura, dejando a un lado (oculto para el público hasta el día en que escribio esto) su seria y elaborada producción artística, si entendemos arte como lo que vuelve a la palestra tras 25 años de silencio mediático, se expresa en los siguientes términos: “el grupo (57) creaba más pensando en el futuro, mientras que yo lo hago basándome en mi memoria”, y añade otra píldora: “los otros miembros del equipo pensaban en el año 2000 como algo maravilloso, en el cual se habría alcanzado la igualdad y que el mundo habría avanzado hasta desterrar la injusticia”.

Resulta divertido el juego (a veces incluso genera apoteósicos axiomas) de clasificar la especie humana en dos tipos, dos variedades diferentes, aun complementarias, que consigan comprender a todas las personas que pueblan el mundo. Las letras han tratado en muchas ocasiones este dilema: Hesse clasificó a las personas como piadosas o racionales, Cortázar inventó los terminos cronopio y fama para precisar su taxonomía humana. Yo también voy a probar suerte. Creo que existen dos tipos de personas: las que miran al futuro y las que lo hacen al pasado. Las primeras son las principales encargadas en producir materia, pensamiento y emociones, al igual que las consumen como un derecho estatuario. Las segundas son las encargadas de revisar, corregir y cuestionar, y por tanto su primordal alimento consiste en la ingestión y rumia de lo ya visto.

Como soy el que acabo de inventar la regla me atribuyo el derecho a quedarme en la silla del juez que contempla la escena. Pero como también este texto debe decir algo de mí, desvelaré mis inclinaciones hacia el hemisferio que gira en el movimiento retrógado. Entiendo la creación artistica como selección de la memoria, como el lento proceso digestivo de la experiencia, como la necesidad de insuflar vida a lo olvidado; la necesidad imperante de repasar los temas que han quedado a la deriva – personales y universales. En definitiva, el justo recuerdo, la reutilización, el espigueo, el coleccionismo barato, la segunda oportunidad. El objet trouvé que aún no ha encontrado museo. »

Y así de preparados, tenéis que ir a ver la exposición, que merece la pena de verdad. Os recuerdo que el Loft of Beauty está en la zona del Alfalafa, en la Candilejo número 8.